El marco jurídico de la UE para el espíritu empresarial de los inmigrantes
La integración de los inmigrantes en la UE es un tema de la legislación y la política nacional, pero varias directivas de la UE establecen reglas comunes para el empleo de ciudadanos no pertenecientes a la UE que son obligatorias y deben ser seguidas por los estados miembros. Con respecto al emprendimiento, no existe una regulación de la UE específica para el emprendimiento de los inmigrantes. El marco legal en los estados miembros de la UE está ampliamente armonizado y se basa en el principio de libertad de establecimiento que garantiza el acceso abierto a la empresa y que las mismas reglas deben aplicarse a todos los empresarios con respecto al establecimiento y operación de su negocio.
Los inmigrantes en la UE no tienen restricciones para establecer empresas y los datos sugieren que un número considerable de inmigrantes inician su propio negocio en lugar de optar por un empleo.

Las políticas de la UE refuerzan aún más la libertad de acceso a los mercados locales para las empresas inmigrantes. La promoción del emprendimiento está incorporada en la estrategia Europa 2020 y el plan de acción de emprendimiento 2020, donde uno de los compromisos específicos es facilitar el emprendimiento entre los inmigrantes que ya están presentes y residen en la UE, en base a las mejores prácticas de los países miembros. La estrategia se centra en los obstáculos que enfrentan los migrantes para iniciar y hacer negocios, incluidos su conocimiento limitado y la falta de información sobre la cultura empresarial y el entorno regulatorio del país de acogida, así como las dificultades administrativas y socioculturales de administrar el negocio. El acceso a la financiación no se menciona en la estrategia como un obstáculo principal para el emprendimiento de los inmigrantes.
No hay restricciones legales implícitas a nivel de la UE para que los empresarios inmigrantes inicien y realicen negocios, pero deben tener un estatus legal y un permiso de residencia válido. El marco legal para la residencia de inmigrantes está sujeto a diferentes prácticas en los respectivos estados miembros. Además, las diferentes categorías de inmigrantes tienen diferentes puntos de partida con respecto al acceso al apoyo empresarial. En general, los migrantes que tienen residencia en el país receptor pueden iniciar negocios, excepto en el caso de grandes inversionistas a quienes se les otorga el estatus debido a su gran inversión.
En el caso de los inmigrantes por razones humanitarias, existe una regulación de la UE sobre su acceso a los mercados laborales y el emprendimiento. La Directiva sobre condiciones de acogida (2013/33/UE) establece los derechos de los solicitantes de asilo y refugiados y es aplicable a nivel nacional. Esto incluye un período de transición de no más de nueve meses desde la presentación de una solicitud de asilo hasta que se otorga el acceso al mercado laboral. Lo mismo se aplica a los empresarios. Cabe señalar que este calendario no siempre se cumple a nivel nacional, y se han observado ejemplos de esto en el Reino Unido.
